Buena música, buen ámbito y, más que nada, buen rollo es lo que hubo ayer por la noche en Icónica Fest con el mágico telón de fondo de la Plaza de España. El monumental grupo arquitectónico, desarrollado por Aníbal González para la Exposición Universal de 1929, resultó el más destacable ámbito viable para homenajear este 12 de octubre festivo a la Expo 92, de la que se cumplieron ayer 30 años.
Y qué mejor forma de festejar esta efeméride que reunir en una sola noche Seguridad Popular y Hombres G, 2 de las míticas bandas que desfilaron por el ámbito de la Plaza Sony a lo largo de los seis meses que duró ese acontecimiento universal en la Isla de la Cartuja. La de ayer por la noche fue una cita que no desearon perderse mucho más de 9.000 personas, ni tampoco nuestro Curro, la entretenida mascota de la Expo’92, que se paseó alegre por los balcones de la Plaza de España en ciertos instantes de la velada.
Tras la celebración, viene la resaca
Por De roma Antigüedades
Pero esos macroeventos, que en su instante representaron la euforia de un país que se sentía en desarrollo, dejaron un número notable de espacios vacíos, infraestructuras sin función aparente y elementos ahora desfasados solamente finalizar. Entre ellos, las figuras de la mascota alegre de la Expo de Sevilla que, esencialmente, se jubiló. Tenían todas y cada una de las papeletas para terminar en la basura, pero el destino las llevó a un espacio que se conoce popularmente como el Cementerio de los Curros.
Su origen
Lo que no sabe todo el planeta es que la Expo’92 de Sevilla nació en República Dominicana. El 31 de mayo de 1976 los reyes de España Juan Carlos y Sofía hicieron un viaje institucional a Santurrón Domingo con la meta de hacer nudos de unión entre la recién estrenada monarquía de españa, los países de Iberoamérica y USA.
En esta visita, don Juan Carlos pronunció un alegato en el que mentó la intención de ordenar la “III Exposición iberoamericana”, como las llevadas a cabo en 1929 en Sevilla y Barcelona. Las había ordenado su abuelo, el Rey Alfonso XIII, para festejar el V Centenario del Hallazgo de América. Ese mensaje marcó el comienzo del sendero de Sevilla hacia la Expo’92. Abrió sus puertas 16 años después.